Asesora de Asuntos Sociocomunitarios

Trinidad Oñate

«Mi pecado capital y mayor vicio: la curiosidad. No se preocupen el gato sigue intacto».

Pese a los años, aún no logro ni saciar ni dejar dicha droga. Al contrario, la sociología me mostró y georreferenció más lugares dónde encontrarla. Primero me topé con la rigurosidad metodológica (muy exigente, pero necesaria). Luego, en una cafetería me encontré con Platón. Y, finalmente, descubrí un mundo nuevo y frágil que estaba en la televisión (y fuera de ella). Mundo que no termina de darme razones para continuar esta adicción.

Varias discusiones con la almohada pasaron, «¿estaré mal? ¿seré yo señor?». Hasta que recordé:

¿Qué no son los excesos, sino más bien resquemores del alma? Si he de vivir qué sea… bajo la ley metódica y en el delirio de creerme artesana de la sociología.

Fiel a mis creencias y convicciones, me encaminé para ejercer el oficio de la socióloga. En esas idas y venidas, herramientas adquiridas y corto kilometraje recorrido, llegué al Giro que construye y potencia mi curiosidad.

Más temprano que tarde espero tú encuentres el tuyo.